25 de Mayo, 2019 11:59 PM GMT-4
Berlín, Alemania
El brasileño se impuso en la capital alemana y se ilusiona con arrebatarle el título a Jean-Eric Vergne.
El brasileño Lucas di Grassi (Spark-Audi) se impuso este sábado en el Berlín ePrix, undécima prueba del campeonato FIA de Fórmula E, por delante del suizo Sebastien Buemi (Spark-Nissan) y el francés Jean-Eric Vergne (Spark-DS Automobiles), que se afianza en el liderato con sólo dos carreras, ambas en Nueva York, para el final.
Las posiciones de parrilla se mantuvieron al llegar a la primera curva en el top 10, con Buemi liderando las primeras vueltas con un ritmo muy lento, lo que aprovechó Di Grassi para pasar primero a Vandoorne, al inicio del tercer giro, y posteriormente, en el quinto, a Buemi, lo que le situó líder de la carrera.
Por detrás, Lotterer, que salía 21º, escaló hasta la 15ª posición en tres vueltas, mientras que Mortara ganó tres puestos para colocarse 13º. Un error de Paffett cuando marchaba cuarto, su posición de salida, propició que le pasaran de una tacada Lynn, Abt y Da Costa, bajando el de HWA AG a la 7ª plaza.
Consolidada la primera posición en la carrera, Buemi se cobró 1,5 segundos de ventaja antes de acabar el séptimo giro, con Di Grassi y Vandoorne en posiciones de podio, bajo la amenaza de Abt, tras superar a Lynn en la lucha por el cuarto puesto.
Vergne, líder del Mundial y octavo en la parrilla, logró avanzar al séptimo puesto con los primeros 15 minutos de carrera consumidos, dejando atrás a Paffett en una ajustada maniobra que le situó detrás de Da Costa.
Superado el primer tercio de la prueba, ninguno de los 12 primeros clasificados había utilizado aún la carga extra, esperando acontecimientos mientras Di Grassi seguía marcando un ritmo cómodo al frente de la carrera. Vergne fue, precisamente, el primero de los top que activó el modo ataque, perdiendo plaza con Da Costa y tratando de recuperarla cruzando la pista por delante de Paffett, al que no tocó por los pelos.
La respuesta de Da Costa fue activar el moto ataque para defenderse, una maniobra en la que no perdió plaza, arruinando la estrategia de Vergne. El que no perdió el tiempo fue Rowland y viendo los problemas de Paffett se fue a por él en un adelantamiento largo y en paralelo del que pudo defenderse el británico, mientras Lynn, pese a activar el modo ataque, perdió plaza con Da Costa, ya quinto por detrás de Abt.
Por delante, Di Grassi, Buemi y Vandoorne seguían si activar la potencia extra, mientras Abt lo hacía a 24 minutos del final de la carrera, maniobra en la que perdía plaza con Da Costa, ya cuarto tras Vandorrne.
La escalada de Da Costa siguió al pasar Buemi por la zona de recarga, momento que aprovechó el portugués de Andretti Autosport para ponerse segundo, tras el monoplaza de Di Grassi, a más de 3 segundos de distancia.
A 21m40s del final (más una vuelta), Di Grassi activó el modo ataque ante la escalada de Da Costa, un modo de carga extra que tenía activado también Buemi, Vandoorne y Abt, mientras que el portugués ya había consumido el suyo.
Buemi, que aprovechó el modo ataque para pasar a Vandoorne y colocarse tercero, no pudo alcanzar sin embargo a Da Costa, que sin la potencia extra en esta parte de la carrera mantuvo el segundo puesto, con una recarga en la recámara guardándola para la parte final.
Pero Buemi no había dicho su última palabra y aprovechó su ritmo para atacar a Da Costa y pasarle para recuperar la segunda posición a 16 minutos del final, con Di Grassi ya a 4,8 segundos de distancia.
A 15 segundos del final una avería dejó el Jaguar de Alex Lynn en medio de la pista, mostrando los comisarios bandera amarilla en toda la pista, lo que obligaba a los pilotos a rodar a 50Km/h con, en teoría, manteniéndose las distancias, casi 5 segundos para el primero, Di Grassi, respecto a Buemi.
A 13m29s para el final, con bandera amarilla, Buemi pasó por la zona de carga del modo ataque, algo que imitaron sus perseguidores para no perder plaza, una jugada que no se entiende ya que estaban retirando el coche de Lynn de la pista, lo que les obligaba a rodar a 50 Km/h con el moto ataque gastándose por tiempo. Di Grassi, en cambio, esperó una vuelta más y a 10.50 del final activó el modo ataque, aún con bandera amarilla, pero con la batería llena mientras que rivales ya la habían gastado.
Abt imitó la estrategia de Di Grassi desde la 6ª posición, y cuando se relanzó la carrera, tanto Di Grassi como Abt tenía el moto ataque contras Buemi, Da Costa, Vergne y Vandoorne que lo habían gastado.
Mientras Di Grassi se mantenía cómodamente en cabeza, el primer intento de Abt de ganar posición fracasó al irse largo en una curva, defendiéndose perfectamente Vandoorne en la quinta plaza.
El que sí aprovechó su ritmo y tener un 2% más de batería para atacar fue Vergne, que logró pasar a Da Costa para situarse en posición de podio a algo más de 7 minutos para el final de la carrera.
Grassi agotó la carga extra a 7 del final, más una vuelta, sin verse inquietado por nadie y manteniendo un 26% de la batería, un uno por ciento más que Buemi y Vergne, y lo mismo que Da Costa que trataba de recuperar la plaza de podio sin éxito.
Con 32 vueltas cumplidas y 3 minutos por delante Di Grassi mantenía 3 segundos de ventaja, con Buemi acercándose pero sin poder atacar al líder de la carrera, que dominaba el ritmo por delante, mientras que Buemi trataba de defenderse de un Vergne que con este podio se aseguraba escaparse en el liderato del campeonato.
No cambió nada en cabeza al cumplirse los 45 minutos, entrándose en la última con 2.4 de ventaja para Di Grassi, que ya no se dejó sorprender entrando ganador en la meta con Buemi segundo y Vergne conservando el tercer puesto para asegurarse el liderato del campeonato, ahora con 102 puntos, por delante de Di Grassi (96) y Lotterer (86) que tras su error en la clasificación tuvo un problema en la carrera que le relegó a la 21ª plaza, fuera de carrera.
Por su parte, José María López, en un fin de semana muy complicado con el equipo GEOX Dragon, comenzó 20° y había avanzado hasta la 14° posición cuando se quedó sin energía en su auto sobre el final y cayó al 20° y último puesto entre quienes completaron la carrera.
Di Grassi, campeón en 2016, logró su décima victoria en este certamen -segunda de la presente campaña-, en el que ahora es segundo a seis puntos de Vergne.
Pese a arrancar desde la tercera plaza de la parrilla, el brasileño dominó con autoridad la prueba y acabó con un margen de 1.856 segundos sobre Buemi y 2.522 sobre Vergne, que remontó desde la octava plaza en la que comenzó.
El certamen termina con dos carreras en Nueva York los días 13 y 14 de julio.
El piloto argentino tuvo un fin de semana especialmente difícil en la visita de la Fórmula E a Berlín, donde finalizó en la 20° y última posición este sábado en la carrera.
Después de los entrenamientos del viernes, donde fue último en el segundo ensayo, "Pechito" había calificado de "horrible" el auto, asegurando que había algo mal en el mismo, y la situación no fue muy diferente a la hora de clasificar, donde obtuvo el 20° lugar entre los 22 participantes.
En carrera López logró avanzar en el clasificador sacando provecho de los retiros de Alex Lynn y André Lotterer y gracias a un par de adelantamientos, como sobre Jerome D’Ambrosio y Maximilian Gunther, su compañero de equipo en Dragon, pero cuando se encaminaba a terminar 14° de repente su monoplaza se quedó sin energía en los últimos metros y cayó hasta la 20° y última posición.
"Fue un error del equipo. Normalmente te van avisando. Después del Full Course Yellow me dijeron que tenía energía para ir a fondo hasta el final de la carrera, así cuando empecé a defender con (Gary) Paffett obviamente venía tranquilo pensando que estaba todo bien y nadie me avisó sobre el final", relató López en diálogo con FOX Sports Latinoamérica.
"Obviamente fue un error del lado del pitwall porque me tendrían que haber avisado, primero el error de decirme que podía ir a fondo cuando tendría que haber tenido más atención, y sobre el final que en las últimas tres, cuatro vueltas no sentí más nada en la radio y nadie me avisó que tenía este problema o que podía llegar a tenerlo", agregó el cordobés.